ensayos/artículos/entrevistas

literatura

Lo que Felisberto no sabía. Sobre las Primeras invenciones de Felisberto Hernández (1925-1939), por Gustavo Lespada.

sociología/análisis político

Vaca flaca y minotauro. Ascenso y caída de la imaginación política argentina, por Christian Ferrer.

penalismo crítico

Los crímenes del amor, por Leonardo Sai.

en discusión

Lo dado (o de qué mierda se la da Vicente Muleiro),
por Sebastián Hernaiz.

libros

Presentación de David Viñas. Crítica de la razón polémica. Un intelectual argentino heterodoxo entre contorno y dios, de Marcela Croce,
por María Iribarren.

De Viñas a Croce. Vocería de clase y clase de vocería, por Sebastián Hernaiz.

Relato del convaleciente, sobre Aunque no hubiera cielo de Virginia Canton, por Elena Donato.

Manos Arriba : la novela asaltante de Ojeda Ortiz de Chile, por Rocco Carbone.

El mate en jaque. Acerca de Rosas enamorado de Marcelo Svartman, por María del Carmen Velazquez.

 

columnas mensuales

Las chicas de Letras se masturban así VI,
por Elsa Kalish.

Nazismo bizarro: Ilsa, She-Wolf of the SS: nazismo y cine berreta, por Juan Terranova.

Séxodo: J ´suis rouge, por Tatiana Goransky.

 

cine

Perlas en el Fango -cine por cable en Argentina- (mayo 2005), por Hernán Sassi.

 

teatro

Teatro en Buenos Aires, por María Bayer.

 

   
   
 
 
 
 
 
Dirección y diseño: Juan Diego Incardona
Consejo editorial: Inés de Mendonça, Marina Kogan, Juan Pablo Lafosse
Control de calidad: Sebastián Hernaiz
Prensa: Elsa Kalish
 
 
 
 

imágenes de ilustración:

márgenes laterales : Giorgio De Chirico, Andromache (detalle), The Disturbing Muses (detalle), y Ariadne (detalle).

margen inferior: Tadeusz Makowski, Kapela dziecieca (detalle).

 

 

 

 

 

 

 

 

 
Viejo Gómez, vos que estás de manguero doctorao y que un mango descubrís aunque lo hayan enterrao, definime, si podés, esta contra que se ha dao, que por más que me arremango no descubro un mango ni por equivocación; que por más que la pateo un peso no veo en circulación. ¿Dónde hay un mango, viejo Gómez? Los han limpiao con piedra pómez. ¿Dónde hay un mango que yo lo he buscado con lupa y linterna y estoy afiebrado? ¿Dónde hay un mango pa darle la cana si es que se la deja dar? ¿Dónde hay un mango que si no se entrega lo podamos allanar? ¿Dónde hay un mango que los financistas, ni los periodistas, ni perros ni gatos, noticias ni datos de su paredero no me saben dar? Viejo Gómez, vos que sos el Viancarlos del gomán, concretame, si sabés, los billetes, dónde están? Nadie sabe dar razón y del seco hasta el bacán todos, en plena palmera, llevan la cartera con cartel de defunción y, jugando a la escondida, colman la medida de la situación.
Ivo Pelay