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El lado ciego
Carlos Battilana
Editorial Siesta, 2005

por Sebastián Hernaiz

 

 

 

 

Desde el título de la primera página encontramos la estructura de este texto: "Fragmentos". Fragmentos breves, de menos de una carilla cada uno. Fragmentos esparcidos en la carilla derecha contrastando contra el blanco de la izquierda. Fragmentos breves en que un personaje sin nombres ni rasgos recorre su existencia. O al revés. Una existencia sin rasgos recorre a un personaje sin nombres. O quizás no sea un personaje, pero se recogen los fragmentos bajo el significante vacío del sin nombre. La narración poética de El lado ciego nos enfrenta a una configuración que parte de representar esa existencia que recorre el tiempo "desde la insoportable intemperie del instante" -que, a su vez, es un tiempo que recorre la existencia y un tiempo que configura al tiempo. El personaje, sujeto del tiempo que sujeta al tiempo, se nos aparece por lo que quiere, siente -toca, oye, ve-, sabe y puede. Deseos, cuerpo, saber y poder, así se construye el sujeto hablado en este texto, así el tiempo y el ritmo de estos fragmentos. Pero no se completa. "Todas las cosas que lo rodean tienen vida". Todo intimida y "lo espera con tintas en las manos, escribe". Pero la sintaxis no alcanza. La coordinación está partida "mira por la ventana, y sólo ve el movimiento de los autos". Entre mirar y ver, la y coordinando, pero también la coma y el sólo, hiriendo la unión, el sentido completo. La sintaxis no alcanza, y tampoco la palabra. La descripción, la enumeración, casi siempre son casis, los verbos, casi siempre, potenciales, condicionales: "Con las letras de las palabras, ordena el mundo. Pero el mundo está hecho de materias, de desvíos, de bloques irrespirables", "Una joya, casi". Entre la joya y decir la joya: casi: la palabra apareciéndosenos siempre como marca de la visión de lo borroso. Del objeto a la mancha: lo borroso. Del poder al pudiera: lo borroso. De la percepción a la insensatez: lo borroso. Lo borroso que está, o transcurre o persiste. Lo borroso del presente que ya no es. Lo borroso anclado -borroso aún- haciéndose sobrevivible en el hábito. Lo borroso del sentido a la intemperie, lo borroso que intimida, lo borroso que la escritura ordena, intenta ordenar, desordena e intenta desordenar.

 


Sebastián Hernaiz

 

 
 
el interpretador acerca del autor
 
               

Sebastián Hernaiz

Nació en 1981, actualmente vive en Buenos Aires.

Publicaciones en el interpretador:

Número 1: abril 2004 - Nenas muertas (poesía)

Número 2: mayo 2004 - La cosa del caso (artículo acerca de La cosa Blumberg)

Número 2: mayo 2004 - Noticias (poesía)

Número 2: mayo 2004 - T.E.G (Tácticas y Estrategias alrededor de Guantánamo (ensayo acerca de El verdadero cuento del Tío Sam de Ezequiel Martínez Estrada y Siné)

Número 3: junio 2004 - Perros (narrativa)

Número 4: julio 2004 - 26 de junio (aguafuertes)

Número 5: agosto 2004 - Noche en la catedral (aguafuertes)

Número 5: agosto 2004 - Bar (narrativa)

Número 6: septiembre 2004 - Sobre el sinsabor de una escena del IV Congreso de teoría y crítica literaria de Rosario (aguafuertes)

Número 6: septiembre 2004 - Diseño exclusivo (narrativa)

Número 7: octubre 2004 - Propiamente, un crimen (Narrativa)

Número 9: diciembre 2004 - 19 de diciembre (narrativa)

Número 10: enero 2005 - Callejeros (artículo)

Número 10: enero 2005 - Arbolitos de Navidad (aguafuertes)

Número 11: febrero 2005 - Didáctica, General (aguafuertes)

Número 11: febrero 2005 - Sexo explícito (poesía)

Número 11: febrero 2005 - Porteros anarquistas (narrativa)

Número 12: marzo - de tan Buenos Aires (poesía)

Número 13: abril 2005 - Manifiesta (poesía)

Número 13: abril 2005 - Proyect (aguafuertes)

Número 14: mayo 2005 - Ad hoc abortare (poesía)

Número 14: mayo 2005 - Lo dado (o de qué mierda se la da Vicente Muleiro) (artículo)

Número 14: mayo 2005 - Vallejo en Puán (aguafuertes)

Número 14: mayo 2005 - De Viñas a Croce (artículo)

Número 15: junio 2005 - Coger o escribir (narrativa)

Número 15: junio 2005 - A partir de la carta de del Barco -política, muerte y carencia (artículo)

Número 16: julio 2005 - Ñ me da por las pelotas (artículo)

Número 17: agosto 2005 - Más gallinas degolladas (narrativa)

 
   
   
 
 
 
Dirección y diseño: Juan Diego Incardona
Consejo editorial: Inés de Mendonça, Marina Kogan, Juan Pablo Lafosse, Juan Pablo Liefeld.
sección artes visuales: Juliana Fraile, Mariana Rodríguez
Control de calidad: Sebastián Hernaiz
 
 
 
 

Imágenes de ilustración:

Margen inferior: Jacek Malczewski, Death (detalle).