el interpretador poesía

 

En mi auto, Pablo

Maxi Franco

 

 

 

 

qué rápido es Pablito Aimar,
se mueve como un relámpago en el asiento de al lado.
qué fresca y tersa su piel, joven lozanía que quiero rozar

pero me mira de reojo como un colibrí, inquieto, nervioso,
repiquetea-tea su figura en el aire

le arrojo el manotazo peludo, lento, anunciado,
buscando sus dedos finísimos, impecables

es rápido Pablito Aimar,
su mano ya no está,
reposa lejana en la falda opuesta de jean tirante

llegamos, no hay tiempo para nada,
me acerco a su cutis blanco con mi mejilla lija, áspera
como de tío juan carlos

ahora, tramposo, ridículo,
estiro la lengua ácida hacia su garganta desnuda

es rápido pablito aimar,
otra vez la presa intocable,
le mancho la camisa blanca con la baba etílica

ahora tiene miedo pablito
gana la acera y como que corre y resbala elegante el muy mierda,
es un angel pienso

pero yo también soy rápido
le tiro de atrás, a la tibia le voy,
a romperlo,
lo fracturo y no juega más, vocifero por dentro

pero qué pasa, lo veo alejarse burlón
tirando caños en el aire
se mete en la casa inexpugnable

me sobra Pablito Aimar,
se rie socarrón,
sin que yo pueda escucharlo
desde el suelo mojado.

 

 

©Maxi Franco

 

 
 
 
 
Dirección y diseño: Juan Diego Incardona
Consejo editorial: Inés de Mendonça, Marina Kogan, Juan Pablo Lafosse
Control de calidad: Sebastián Hernaiz
Prensa: Elsa Kalish
 
 
 
 

Imágenes de ilustración:

Margen inferior: Antonio Berni, Las vacaciones de Juanito (detalle).